El ajonjolí, es una semilla aceitosa conocido como sésamo, una oleaginosa de la especie (Sesamum indicum) con origen desconocido, sin embargo se conoce que hay 12 especies en África tropical y en la India, los hay de dos colores blancas y negras, esta semilla contiene ácidos grasos como la omega 3, fibra y potasio, protector del corazón, se dice que dos cucharadas de ajonjolí es equivalente a una taza de leche y 180 g de un bistec de res, el ajonjolí negro contiene mayor cantidad de antioxidantes, estos ayudan al proceso de reducción del colesterol, por su contenido de grasas insaturadas y lectina mejorado el tránsito intestinal.

En el mundo el 70% de la producción se da en la India, China, Myanmar y Sudán, en algunos países como México también se produce el ajonjolí en varios estados de la república como en Sinaloa, Sonora, Oaxaca, Chiapas y Guerrero, más se utiliza para producir aceite comestible, sin embargo la población la conoce muy poco por lo que es necesario hacer conocer a las persona sobre los beneficios saludables y nutritivas de esta semilla a fin de que se incremente el consumo de ajonjolí en la ración humana en una proporción equilibrada sobre todo por su contenido en omega 3 que junto con el pescado y la linaza es muy bueno para nuestra salud, algunos entendidos en la materia manifiestan que el contenido de la fibra soluble de las semillas del ajonjolí potencia el efecto cardioprotector y controla la glucosa en la sangre, la fibra insoluble actúa como prebiótico favorece la microfauna intestinal, como la mayoría de los alimentos cultivados, el ajonjolí contiene compuestos bioactivos, en especial lignanos que tienen alta capacidad antioxidante, protegiendo las células del envejecimiento y el daño del ADN.

Según el investigador Sathwik, en su estudio sobre el aceite de ajonjolí manifiesta que consiste en una mezcla de triglicéridos formados por ácidos grasos mientras que el aceite mineral está constituido por mezclas de hidrocarburos alifáticos, motivo por la cual el aceite de ajonjolí presenta una mayor capacidad de lubricación. La naturaleza polar del aceite de ajonjolí le da mayor afinidad por las superficies metálicas que el aceite mineral no polar¹

Así mismo en distintas investigaciones realizadas sobre el ajonjolí coinciden en que el ajonjolí es el condimento más antiguo conocido por el hombre. Lo cierto es que desde hace mucho tiempo esta deliciosa semilla añade sabor y consistencia a nuestros platillos. Sin embargo, también puede aprovecharse con fines medicinales². El ajonjolí tiene muchos beneficios potenciales para la salud y se ha utilizado en la medicina popular durante miles de años, aunque no existe una dosis recomendada, muchos especialistas coinciden en que un pequeño puñado por día es suficiente para disfrutar de las siguientes propiedades:

Por su alto contenido de lignanos, vitamina E y otros antioxidantes ayuda a prevenir la hipertensión y reducir la acumulación de placa en las arterias, un estudio encontró que consumir 2.5 g de ajonjolí negro en polvo a diario durante un mes ayuda a disminuir la presión arterial.

Una investigación encontró que consumir 40 g de ajonjolí por día durante 2 meses, ayuda a reducir los niveles de colesterol malo y de triglicéridos, especialmente por su alto contenido de grasas saludables y antioxidantes que tienen estas semillas

Referencias:
  1. Sathwik, K. R., Jayadas, N. H. y Kailas, S., Natural (2012) Oil-Based Lubricants,In Green Tribology, Nosonovsky, M.; Bhushan, B., Eds. Springer, Berlin Heidelberg, 287-328. 
  2. https://www.paligmed.com/es/%C3%A1lbum-de-fotos/controlar-el-colesterol-y-mas-beneficios-del-ajonjoli

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