Hay momentos en que nos podemos preguntar por qué nuestra memoria es tan mala, pero recordemos que olvidar es parte de la vida.

De hecho, la gente olvida sorprendentemente rápido. Las investigaciones han encontrado que aproximadamente el 56% de un estado de arte se olvida en 60 minutos, el 66% después de un día y el 75% después de seis días. La realidad es que, si bien el cerebro es capaz de realizar hazañas impresionantes, su capacidad para almacenar y recordar detalles es limitada. Hay diferentes formas y razones por las que olvidamos las cosas. Hay varios aspectos que pueden influir en el motivo por el que la gente olvida:

Alcohol: Beber alcohol puede tener un efecto negativo en la memoria, por lo que es mejor no consumir más de una o dos bebidas al día.

Depresión: Los síntomas comunes de la depresión incluyen mal humor y pérdida de interés, pero también pueden ocurrir dificultades para concentrarse y olvidos en los trastornos depresivos.

Falta de sueño: El sueño juega un rol primordial en la consolidación de la memoria, por lo que la falta de un sueño de calidad puede tener un impacto negativo en tu memoria.

Medicamentos: algunos medicamentos pueden afectar la memoria, incluidos los antidepresivos, los sedantes y los medicamentos para el resfriado y las alergias.

Estrés: el estrés excesivo, tanto agudo como crónico, también puede contribuir a provocar el olvido.

Edad: el olvido relacionado con la edad es común y normal, ya que las personas tienden a experimentar ciertos tipos de deterioro cognitivo a medida que envejecen; sin embargo, los problemas importantes de olvido a medida que una persona envejece pueden implicar un signo más grave, como la enfermedad de Alzheimer.

La intervención temprana puede ayudar a mejorar los resultados de algunos problemas y afecciones de la memoria, por lo que es importante buscar ayuda de inmediato.

Cómo minimizar el olvido

Si bien algunos olvidos son inevitables, hay algunas cosas que puedes hacer para ayudar a consolidar información importante en tu memoria. Algunas prácticas que pueden ayudar a reducir el olvido incluyen:

Ejercicio: las investigaciones sugieren que el ejercicio puede conducir a mejoras rápidas en la función de la memoria. No es necesario pasar horas en la cinta de correr o en el gimnasio para obtener este beneficio. Los resultados sugieren que el ejercicio breve y muy ligero produce mejoras rápidas en la función de la memoria.

Duerma lo suficiente: Es crucial dormir lo adecuado para gozar de una excelente salud física y mental. Si bien las necesidades de sueño pueden variar, la recomendación típica para los adultos es de siete a nueve horas por noche.

Ensayar la información: A veces la mejor manera de memorizar algo y reducir las posibilidades de que se olvide es utilizar el viejo recurso: el ensayo. Repase la información repetidamente hasta que la haya memorizado.

Anótelo: cuando todo lo demás falle, anote información importante para poder consultarla más adelante. En algunos casos, el acto de escribirlo puede ayudarte a recordarlo más adelante.

Referencias:
  1. Acosta, M. (2019). SUEÑO, MEMORIA Y APRENDIZAJE. MEDICINA, 79 (Supl. III), 29-32. http://www.scielo.org.ar/pdf/medba/v79s3/v79s3a08.pdf

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