Desde tiempos inmemoriales, la mención de la palabra brujería provoca escalofríos, miedo y pavor en la columna vertebral de los no iniciados que temen las dañinas inclinaciones de las brujas. Como resultado, esto ha generado mucha investigación para comprender de qué se trata la brujería.

¿Es la brujería una realidad o simplemente un producto de la imaginación de la gente? Si es real, ¿cuál es su naturaleza y características? ¿Tiene un origen rastreable? ¿Cómo perciben los peruanos la brujería? Es de destacar que académicos de diferentes disciplinas y culturas han demostrado en su experiencia un esfuerzo considerable en su deseo de comprender y explicar el fenómeno de la brujería. De la misma manera, se han propuesto teorías que van desde las difusionistas hasta las psicológicas, sociológicas y antropológicas, buscando desentrañar el misterio de la brujería; motivo por el cual se considera crucial emplear una herramienta filosófica, los métodos de hermenéutica y análisis con los que se profundiza en las diversas concepciones de la brujería, su realidad y posibilidad, y el fundamento detrás de la práctica y las aplicaciones.

De hecho, esto mostrará una gran diferencia entre todos los demás enfoques que se han utilizado en el estudio de la brujería (sociológico, antropológico, psicológico y religioso) dado que la naturaleza de la brujería es metafísica, el enfoque científico de la investigación y otros enfoques pueden no ser efectivos en asuntos esotéricos ávidos, por lo tanto, contamina todas las explicaciones científicas; en consecuencia, la filosofía, siendo la ciencia de toda la realidad y una interpretación sistemática de todas las experiencias y la búsqueda de la verdad última, se convierte en el mejor enfoque para un examen adecuado de la naturaleza de los fenómenos mágicos o misteriosos como la brujería y otros sucesos paranormales.

Las creencias en brujería y hechicería, hasta ahora registradas a veces tanto por su importancia sociológica como por su valor de entretenimiento, pueden tener el ejercicio de coadyuvar al entendimiento de los procesos sociales, pero sólo si los registra de tal manera que se pueda apreciar su relevancia social, se permite ser muy apreciados en su valor como indicadores de relaciones sociales totalmente explotados. Al buscar material sobre hechicería y brujería que pueda ayudarle en su análisis sociológico general, el investigador de campo puede combinar provechosamente métodos tradicionalmente divididos entre antropología y sociología. La necesidad del investigador de campo de proyectarse lo más plenamente posible en el mundo de creencias de su informante no debería llevarle a desatender un aspecto igualmente importante de sus investigaciones, a saber, la recopilación de aquellas atribuidas a superstición, magia, agorería, aruspicina, encantamiento, maldición y nigromancia.

Ciertamente, la brujería como energía afecta la inversión empresarial en los negocios de miembros de la familia de la comunidad humana, que son percibidos como empresarios exitosos, existiendo el miedo a estar expuestos a ataques malignos de las brujas que asustan a la hora de invertir, por lo que la brujería tiene una influencia negativa en la inversión y el desarrollo empresarial (Sambe et al., 2023).

Referencias:
  1. Sambe, N. y Ugba, D. (2023). Witchcraft and Investment Behaviour in Rural Tiv Communities, Benue State, Nigeria. Covenant Journal of Entrepreneurship, 7(1). https://journals.covenantuniversity.edu.ng/index.php/cjoe/article/view/3393

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