La alcachofa (Cynara scolymus) un cultivo originaria de Asia menor y norte de África y traída por los franciscanos del convento de Santa Rosa de Ocopa, Provincia de concepción y se desarrolló en la zona central del Perú.

Sobre todo en los valles interandinos, la alcachofa con espinas conocido comúnmente como la variedad “Criolla”, cuya característica es que este cultivo para su buen desarrollo necesita suelos profundos y de buena cantidad de agua; Desde el año 2010 a la fecha es muy solicitado por empresas agrícolas que se dedican a la exportación con mercados de destino hacia EEUU, España, Italia, Francia entre otros,  juntamente con las alcachofas sin espinas como la Green globe, Imperial Star, etc. cuya inflorescencia inmadura llamado “Capítulo” es procesada en “fondos de alcachofa” o “corazón de alcachofa” respectivamente, para el negocio internacional y para el mercado nacional, su importancia radica por su gran contenido de nutrientes y minerales bueno para la alimentación y salud de las personas, actualmente se le puede encontrar en los mercados ya sea en fresco y también como derivados en capsulas o jarabes de uso medicinal.

Algo importante que resaltar es que la alcachofa con espinas criolla se desarrolla mejor en alturas de 2000 a 3.400msnm. por una característica peculiar que esta variedad de alcachofas necesita “golpes de frio” para su buen desarrollo fisiológico, a diferencia de la alcachofa sin espinas que mayormente se desarrolla desde el nivel del mar hasta los 800 msnm. adecuadamente, existen testimonios en el aspecto medicinal de algunas personas productoras de alcachofa en el valle del Mantaro, quienes mencionan que es muy bueno para combatir la vesícula biliar, con un tratamiento de consumir una alcachofa picada en trozos más unas gotitas de limón por espacio de 30 días desaparecieron las piedritas de la vesícula y dejo de sentir los dolores y la fiebre ocasionado por dicha enfermedad.  

Youssef (2015), menciona que la alcachofa es una hortaliza típica de la cuenca mediterránea y pertenece a la especie Cynara cardunculus, pero también se cultiva en algunos países de Oriente, Asia y América. Es una planta que se ha usado desde la antigüedad por los egipcios, griegos y romanos por sus propiedades terapéuticas contra patologías hepáticas y digestivas, y durante las últimas décadas se le han atribuido y demostrado una gran variedad de propiedades contra muchas enfermedades. 

Igualmente, Ben Salem et al. (2015), manifiesta que en la primera mitad del siglo XX, científicos franceses e italianos comenzaron la investigación moderna sobre estos usos medicinales tradicionales de la planta de alcachofa y descubrieron que los extractos de esta planta estimulaba el hígado y la bilis, gracias concretamente a la cinarina, un compuesto característico de estas plantas, a partir de la década 1950, se descubrió que la cinarina podía bajar el colesterol.

Robles (2001) dice en su publicación sobre el cultivo de la alcachofa, que de acuerdo a su composición la alcachofa no es solo una hortaliza nutritiva sino altamente protectora de la salud, además de adecuada para regímenes de conservación de la figura, por su contenido de fibra, vitamina C y flavonoides antioxidantes, previene la formación de tumores, cáncer del colon, senos y próstata, además de problemas cardiovasculares. Su alta proporción de magnesio le confiere efectos antidepresivos y refuerza el sistema reproductivo. Sumado al folato reduce en las mujeres el riesgo de ciertos defectos cerebrales o espinales del feto durante la gestación. La alcachofa contiene un alcaloide llamado cinarina que es estimulante del hígado y reduce los cálculos biliares, así como el colesterol y la formación de ácido úrico. Por contener también insulina, es conveniente que forme parte de la dieta de los diabéticos. Todas estas propiedades – únicas en una hortaliza – debieran ser mencionadas en cualquier programa dirigido a la promoción de su consumo.

Referencias:
  1. Youssef Ahmiane (2015) Efectos de los compuestos activos y funcionales de la alcachofa (Cynara cardunculus) en el control del metabolismo energético Grau de Bioquímica, pag. 5
  2. Ben Salem, M. et al. (2015) Pharmacological Studies of Artichoke Leaf Extract and Their Health Benefits. Plant Foods Hum. Nutr. 70, 441–53.
  3. Fausto Robles (2001) La alcachofa, nueva alternativa para la agricultura peruana, PROMPEX 

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